Pero ahora se enorgullece por ser la protagonista de Amores Verdaderos.
La telenovela Amores Verdaderos registra los más altos niveles de audiencia y su protagonista, Erika Buenfil, se siente orgullosa de participar en la producción de Nicandro Díaz, y reconoce que la hizo sentir fuera del olvido.
"Me siento muy contenta, no me creo más de lo normal, ni mucho menos, ahora lo disfruto de otra manera", aseguró la actriz a los micrófonos del programa de radio de Flor Rubio.
También confesó cómo se sentía antes de la telenovela: "El ser madre soltera me pegó, sientes que te ven diferente, que tu vida cambia, sientes dentro de ti como una culpa, en algo fallé, en qué me equivoqué, entonces eso sí te pega y creo que también me pegaba en lo profesional y lo reflejaba porque me daban buenos papeles pero ya no el protagónico, entonces ahora que me lo dan pude demostrarme que soy una buena mujer, una gran mamá, que lo logré".
En cuanto a su hijo Nicolás, quien debutó en Amores Verdaderos, resaltó que ya comprende su trabajo y la admira: "Ahora me siento muy orgullosa y muy segura porque sigo siendo la misma y puedo seguir teniendo éxito. Me hacía falta, le puedo demostrar a mi hijo que soy una mujer que trabaja y quién es su mamá, claro que le vale gorro ahorita, pero creo que lo reconoce y le gusta ver la telenovela, ya entiende mi trabajo un poquito más".
Incluso detalló que los domingos trata de pasar tiempo de calidad con su niño, inventan juegos y se la pasan muy bien, pero "ansío como loca podernos ir de vacaciones porque no he tenido tiempo".
