Esta historia inicia cuando Iván (David Zepeda), de 14 años, regresa junto a su madre, Alicia (Leticia Calderón), a la tierra que lo vio nacer: Álamos, Sonora; y donde vive su padre Juan Jaime Mondragón (Juan Ferrara), un rico y poderoso empresario y agricultor que no lo reconoce como su hijo y quien además los rechaza y amenaza.

Alicia, quien guarda un secreto sobre su origen, se ve obligada a aceptar el trabajo como cocinera en la casa de la familia Lomelí Curiel, donde además de Doña Carlota (Delia Casanova), su hija Lucrecia (Rosa María Bianchi) y su yerno Gerardo (Alejandro Tommasi), viven dos niñas: la adolescente Maripaz (Laisha Wilkins) y la pequeña (Sandra Echeverría).

En la casa de esa rica familia, Iván ayuda en todo lo que puede y gracias a su inteligencia continúa estudiando, con la generosa ayuda de Doña Carlota, hasta cumplir 19 años; al tiempo que Maripaz, de 18, regresa después de haber estudiado en el extranjero. Iván se siente atraído por la coqueta joven, y ella,  frívola y caprichosa, decide seducirlo para divertirse y, sin medir las consecuencias, queda embarazada de él.

El escándalo en la familia es enorme; al grado que Lucrecia, la severa madre de Maripaz, una mujer obsesionada por las apariencias, ordena que el joven reciba una golpiza. Durante la trifulca, uno de los pandilleros muere y le hacen creer a Iván que él es el responsable. Para su mala suerte, cuando busca refugio en su casa, descubre que su mamá ha muerto, pues estaba embarazada (sin que nadie lo supiera) y muere víctima de un aborto.

Adolorido y confuso, piensa que los responsables del fallecimiento de su madre son Lucrecia y el poderoso Juan Jaime Mondragón; con todo en su contra y nada más que perder, decide, lleno de rabia e impotencia, cruzar ilegalmente hacia los Estados Unidos.

Es en Los Ángeles, California, donde vivirá once años y donde conoce a Anthony Mcguire (Pedro Armendáriz Jr.), quien será su protector, lo adoptará y motivará  para regresar a México, pero no solamente para hacer negocios ahora que es todo un  profesionista, sino para enfrentar su pasado.

Muchas son las intrigas y las sorpresas que Iván descubrirá cuando regresa a Sonora; entre ellas que el hijo que concibió con Maripaz desapareció, misteriosamente, el mismo día en que nació y del cual nadie conoce su paradero.

Uno de los momentos más intensos será la conmovedora confesión de Lucía, la hermana menor de Maripaz, una joven psicóloga llena de virtudes y quien lo ha amado en secreto desde que era una  niña; algo que él no imagina.

La fuerza del destino se encargará de poner cada cosa en su lugar y a cada quien con su cada cual; pues será Lucía, aquella niñita simpática y hoy una mujer hermosa y valiente, quien lo ayudará a encontrar a su hijo, recuperar su dignidad  y  superar con entereza todos los obstáculos.

Juntos, Iván y Lucía, descubrirán el  valor de la lealtad, de la honestidad y de la verdad  y  encontrarán el amor  gracias a La Fuerza del Destino.